Quiero empezar este nuevo año con una receta muy fácil y con bastantes calorías. Después del roscón, los turrones, mantecados y demás dulces navideños con sus  previas comilonas no vendrá de unas galletitas «de ná» #ladietapalasemanaqueviene.

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Hoy prepararemos unas shortbread cookies que son unas galletas de origen escocés «megamantecosas», para nada empalagosas y perfectas para acompañar un té Earl Grey, of course. Únicamente necesitaremos cuatro ingredientes y un cuenco, una batidora de varillas, un tenedor, un rodillo, la nevera, papel film y… ¡Listo! Aunque yo hice trampas y utilicé un cortapastas #finaqueesunaoiga. Os dejo la info del mismo aquí.

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Y sin más dilación…. ¡A por la receta!

Ingredientes:

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230 gramos de buena mantequilla, sin sal y a temperatura ambiente. 

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345 gramos de harina todo uso y un poco más para la superficie de trabajo y el rodillo.

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115 gramos de azúcar granulado. 

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Un pellizco de sal. 

En un cuenco y con ayuda de la batidora de varillas le damos un «meneito» a la mantequilla junto a la sal y el azúcar. Debemos obtener una mezcla cremosa. 

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Ahora, añadimos la harina y volvemos a batir hasta que nuestra mezcla adquiera una textura arenosa. 

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Con nuestras manitas apretamos la masa para formar una bola ¡OJO! No os paséis o la mantequilla se derretirá con el calor de vuestras palmas y dedos.

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Forramos la masa con papel film y la metemos en la nevera durante 40-60 minutos. 

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Transcurrido el tiempo de reposo precalentamos el horno a 180º, calor arriba y abajo. 

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Forramos la bandeja de horno con papel sulfurizado. 

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Sacamos nuestra masa de la nevera.  

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Espolvoreamos la superficie de trabajo con un poco de harina… ¡POCA! La suficiente para que no se nos pegue la masa. 

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Disponemos la bola mantecosa sobre la superficie de trabajo. 

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Esta vez espolvoreamos el rodillo con otro poco de harina.

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Extendemos la masa con mucho cuidado y sin apretarla en exceso. 

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Una vez obtenido un rectángulo de masa nos ayudamos con el cortapastas para dar forma a nuestras galletas. 

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Colocamos las galletas en la bandeja dejando un espacio entre unas y otras ya que engordan un poquito al cocinarse. 

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Pinchamos con un tenedor la superficie de nuestras shortbread. 

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Horneamos 25-30 minutos o hasta que estén doraditas. 

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Sacamos las galletas del horno y las dejamos enfriar totalmente en la misma bandeja. 

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¡Devoramos! 

Antes de despedirme quiero protestar…  Señor@s ¿qué os ha dado con Jamie Fraser? ¡ESTÁIS EQUIVOCAD@S! El único hombre realmente atractivo de Outlander es Dougal Mackenzie (y me lo han «matáo» #AndreaveteaportudosisdeFluoxetina #tomaminispoiler). En fin, que voy a darme a la bebida hasta el miércoles que viene… 

 

P.D: Haced el favor de comentar, no muerdo a nadie… Bueno, depende. Achuchones «apretaos». 

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Notas finales:

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Podéis sustituir el azúcar granulado por azúcar convencional pero ni en sabor ni en textura os quedará igual. 

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Para darles un toque especial a las shortbread podéis incorporar a la masa una pasas picadas finamente o arándanos secos. También podéis hornearlas siguiendo esta receta y una vez frías cubrirlas con una capa de chocolate negro que dejaréis enfriar.

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Andrea ACOSTA

Community Manager de ACOSTA ars. Escritora de tres Best sellers y guionista de cine para adultos especializada en el género BDSM. Chef que no acabó de cocinarse aunque… ¿Quién dijo de este agua no beberé? Foodie empedernida, superviviente de la anorexia, madre de un futuro rompecorazones y adicta confesa a los zapatos.

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